La iglesia del Carmen fue deificada a mediados del siglo XVI, para fines de ese mismo siglo se fundó el convento para religiosas en esta ciudad por Fray Andrés de Tovilla, otros dicen que se apellidaba de Uvilla, por equivocación.
La torre del Carmen es tan solo una
parte del antiguo monasterio, donde les enseñaron a varias generaciones de
mujeres durante uno o dos siglos los trabajos domésticos; cocina regional,
repostería, conservación de alimentos, confección de prendas de vestir,
bordados y tejidos con agujas.
En 1602, empezaron las construcciones
de varias atarjeas subterráneas con el objeto de suministrar agua a todos los
servicios, tanto del convento como el de la iglesia, que venía de Cuxtitali.
Costo mucho para terminar la
construcción, tanto en dinero como en mano de obra.
Recaudaron limosnas para adquirir lo
que faltaba y la mano de obra estaba muy escasa, pues tuvieron que mandar a
traer albañiles de Oaxaca y Guatemala.
En 1607, el Dominico Fray Tomas
Escobedo y Blames, nuevo obispo de Chiapas, se preocupó al saber que ya
llevaban 12 años de construcción y aun no terminaba, quien puso mucho de su
parte para esa iglesia terminara.
El templo es de una nave cortada por
un crucero de un solo brazo ahí se alberga la capilla del Carmen.
Hasta 1985 ahí se encontraban las
imágenes, esculturas, estofadas y policromadas de los siglos XVII y XVIII,
como: Cristo en su cruz, Santa Ana, la Virgen Niña y un admirable San
Sebastián. Allí fue el único convento para las mujeres en esta ciudad Real.
Donde se reunieron todas aquellas en
edad de casamiento, que sus padres no las querían dar en matrimonio, por alguna
de tantas causas.
De este convento fue atendida la
petición para su funcionamiento como tal, por el Rey Felipe II con la Cedula
Real de 30 de Noviembre de 1595, con este carácter de, solo para mujeres, bajo
la advocación de Nuestra Señora de la Encarnación de María.
La estructura del templo es
redimentario, sus muros están construidos de ladrillos y piedras sin labrar,
recubiertos con argamasa de arena y cal.
Se considera que el interior de la
iglesia es uno de los más bellos de la ciudad y es importante por su
antigüedad.
La iglesia se incendió en abril de
1993 y fue reparada a fines de ese mismo año y 1994, en ese periodo se
descubrió y resano un arco mudéjar que separa bautisterio de la nave mayor,
construido se cree en el año de 1748.
Referencia: M. en C. Rafael Narvaez Lievano.
Referencia: M. en C. Rafael Narvaez Lievano.
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